|
|
Libros, soberbia y piedrasA Tarquino el Soberbio, uno de los primeros reyes romanos, le perdía, bueno, ya sabes, la soberbia. Un día, la Sibila de Cumas, que andaría escasa de fondos por lo que fuera, le ofreció comprar los 9 Libros Sibilinos, unos libros que siempre según la propia Sibila profetizaban el futuro de Roma. A Tarquino el precio le pareció mucho porque cualquier cosa es mucho cuando no entiendes lo que estás comprando. La Sibila, que del futuro no tendría mucha idea pero que de vender libros sabía un rato, quemó los tres primeros y ofreció los restantes a Tarquino. Eso sí, al mismo precio. Pero pasar a la historia como El Soberbio no es tan fácil como parece. A Tarquino volvió a parecerle caro conocer el futuro en una época en la que te morías de una cagalera así que la Sibila quemó otros 3 libros y mantuvo el precio. Derrotado por su propio apodo, Tarquino cedió y pagó por 3 el precio de 9. Una maquina, la Sibila. Todo estaba y está en los libros. Hay un libro para cada cosa que se te ocurra: para saber vivir y para aprender a morir, para matar sin rastro o morir matando; hay tragedias y vidas enteras, manuales para atravesar galaxias, crear imperios y destruirlos, amar al otro o volverlo loco; hay un libro para petarlo con tu empresa y otro para malvivir, que no es poco. Un libro lleva a otro libro porque antes del hipertexto ya había notas al pie y entré tú y ese experto no hay más que horas de tiempo, de selección de lecturas, de universos elegidos y lecciones aprendidas porque una cosa es saber leer y otra cosa quedarte con algo de lo leído. Leemos como quien mira al tren pasar pero no es uno lo que lee sino cómo entiende lo que lee, cómo lo relaciona con lo leído y más, con lo vivido, con el día a día, con lo que es uno mismo. Leer es interpretar igual que vivir es elegir. Eliges las lecturas y lo que aguantas leyendo y si lo que te cuentan te gusta o te pone tenso, te inquieta o te come por dentro. En tiempos de los shorts, leer es un superpoder. Hay quien lee un libro y luego te lo cuenta en un vídeo y luego en un hilo y luego en un tik tok. Dicen que está todo en internet pero es mentira. Todo sigue en los libros y, de ahí, baja a internet, destilado por lectores amables, influencers interesados o divulgadores, que es la manera de llamar a la gente que lee más que nosotros y luego nos lo cuenta. Hay quien lee libros solo para poder contártelos porque leer hasta cierto punto es como viajar pero sin fotos y menos mal. Si todo lo que inventamos, como decía Borges, son extensiones de nosotros mismos, un libro es una extensión de nuestra imaginación, un relato de nuestra propia memoria, la única forma que tenemos de guardar conocimiento para que pase de los unos a los otros, para no desperdiciar lo aprendido, lo vivido, y que termine colándose por el sumidero de la historia. Por eso, sigamos leyendo. Ya sean libros o artículos o hilos largos, de esos densos que a veces van a algún lado y otros a ninguno, como los buenos y los malos libros. Sigamos leyendo hasta que, al fin, antes de tropezar tres veces con la misma piedra, leamos el cartel que hay justo a lado. Ese que dice: Cuidado no tropieces con las piedras. Si es que ya está todo escrito. La cita del mes Sabemos que un hombre puede leer a Goethe o a Rilke por la tarde, que puede interpretar a Bach y a Schubert y, por la mañana, iniciar su jornada laboral en Auschwitz. Para estar al día
Para leer tranquilamenteHay diferentes tipos de conocimiento y diferentes formas de aplicar el conocimiento. Este hilo, extenso pero lleno de detalles, nos enseña la importancia de elegir qué somos o, al menos, saber qué deberíamos ser. Decimos que el lenguaje no es más que la forma en que nos comunicamos pero quizá eso sea reducirlo todo demasiado. Como si fuera algo externo a nosotros en lugar de algo central a nuestra propia experiencia Es la nueva expresión comodín: crear una audiencia se ha convertido en el eje de cualquier estrategia como si fuera algo sencillo o que pudiera hacer cualquiera. Este artículo analiza su aplicación y el sentido que tiene en algunos de los casos más habituales Para mejorar procesos
Miscelánea
¿Lectura recomendada? No, recomendadísima
Historia Universal de la destrucción de libros Si quieres saber cómo acaba la historia de los Libros Sibilinos, este es tu libro. Un recuento pormenorizado y al peso de todo el conocimiento destruido a lo largo de la historia de la humanidad: ¿cuantos miles, millones de libros habran sido destruidos a lo largo de la historia por acción u omisión o por pura ignorancia? Fernando Baez hace aquí un repaso ameno, histórico y plagado de nostalgia por lo que pudimos leer y no leeremos nunca. 
Con todo lo malo que tiene, hay que reconocerlo: TikTok nos está dejando auténticas glorias de anuncios “mezclados” |
¡Url copiada!